13 Reasons Why —«Por trece razones»— es una novela escrita por Jay Asher y publicada en el año 2007. Al parecer, la novela alcanzó el primer puesto en la lista de bestsellers del mercado estadounidense durante el año 2011.
Perdonaréis mi ignorancia pero, no había escuchado hablar nunca de esta novela. Hasta el día de hoy. Gracias a la producción y adaptación llevada a la pantalla por parte de la empresa Netflix —que sin duda está siendo toda una revolución en cuanto al consumo de películas y series en streaming—, ésta historia de ficción se ha convertido en viral y he podido saber de su existencia.
Os cuento, llevaba un tiempo escuchando a gente decir que era muy buena, o mejor dicho... brutal. A otros, que no les había gustado demasiado —o nada— por el hecho de tener una esencia demasiado 'americana' y/o por el trato que se le da al tema del suicidio.
Bueno, ya se sabe que para gusto los colores, pero el hecho de que una serie apostara por mostrar temas como el acoso escolar y el suicido, y paralelamente que mi pareja también empezara a ver la serie y le gustara, despertó finalmente mi curiosidad.
No me quiero adelantar, pero recordad la frase de: La curiosidad mató al gato.
Si no sabéis de que va la serie os hago un pequeño resumen, aunque ya os haya dado un entrante:
La acción se centra en un instituto de Estados Unidos en el que una de sus alumnas, Hannah Baker, ha fallecido. De hecho, se ha suicidado —por trece razones— y los motivos (personas) que la han llevado a tomar tal decisión los deja registrados en trece cintas de cassette. Éstas, tendrán que ser escuchadas por sus supuestos verdugos si no quieren que la información salga a la luz.
Hasta aquí todo correcto. Como trama encuentro que es muy buena, los actores hacen un trabajo espectacular y recalco que es de agradecer que se trate el tema del bullying por muy incomodo que les sea, a algunos, el ver la crudeza de los actos que muchos niños y jóvenes tienen que sufrir en sus centros escolares.
Pero ahora viene lo que no me ha gustado tanto (⚠ posibles spoilers):
Con ésto quiero decir que la visión y el mensaje que se da a este grupo poblacional en la serie, de un acto de suicidio, es errónea y parcial.
No soy psicóloga, aunque tengo ciertos conocimientos de dicha ciencia, al igual que me valgo de mi experiencia personal, y creo que el proceso mental por el que pasa una persona que finalmente comete suicidio es mucho más complejo de lo que se presenta en la pantalla. Omiten, por ejemplo, un elemento clave: la depresión. Y es realmente clave porque si estamos hablando de una depresión endógena —desequilibrio químico cerebral que imposibilita un correcto funcionamiento de éste— y que no esté tratada por profesionales, puede hacer que la persona enferma termine quitándose la vida. Sin necesidad de tener verdugos o culpables.
Y esto me lleva al siguiente punto.
Y esto me lleva al siguiente punto.
2. La serie, intuyo que por desconocimiento del tema, promulga la idea de que alguien se suicida «por culpa de» —causa-efecto— y sin más elementos de por medio.
Pues bien, el suicidio es multifactorial y es peligroso insinuar que únicamente por sufrir acoso escolar (causa) una persona se suicida (efecto). Y además pareciendo que lo hace como castigo o venganza hacia ciertas personas. Cuando un individuo tiene pensamientos suicidas o lo lleva finalmente a cabo, no está pensando en que ese acto será un castigo y mucho menos en convertirlo en un juego (escuchar las cintas siguiendo el orden, recorrer la ciudad para presenciar el lugar de los hechos, descubrir poco a poco a los implicados en la trama, etcétera). Lo único que tiene en mente es querer dejar de sufrir física y emocionalmente.
Por el único motivo que entendería tal simplificación de los hechos que rodean al suicido, sería el de resaltar la importancia de la detección a tiempo y de la casi nula intervención por parte de los docentes y dirección del centro. Pero tampoco veo que ésta denuncia ocupe una parte sustancial de la serie, ni se visibilice adecuadamente.
Pues bien, el suicidio es multifactorial y es peligroso insinuar que únicamente por sufrir acoso escolar (causa) una persona se suicida (efecto). Y además pareciendo que lo hace como castigo o venganza hacia ciertas personas. Cuando un individuo tiene pensamientos suicidas o lo lleva finalmente a cabo, no está pensando en que ese acto será un castigo y mucho menos en convertirlo en un juego (escuchar las cintas siguiendo el orden, recorrer la ciudad para presenciar el lugar de los hechos, descubrir poco a poco a los implicados en la trama, etcétera). Lo único que tiene en mente es querer dejar de sufrir física y emocionalmente.
Por el único motivo que entendería tal simplificación de los hechos que rodean al suicido, sería el de resaltar la importancia de la detección a tiempo y de la casi nula intervención por parte de los docentes y dirección del centro. Pero tampoco veo que ésta denuncia ocupe una parte sustancial de la serie, ni se visibilice adecuadamente.
3. Ésto me lleva a darme cuenta que hay una falta importante de muestras alternativas al tratamiento de las situaciones que vive la protagonista. Es decir, de: acoso escolar, acoso y abuso sexual y violación. Se puede apreciar cronológicamente como va escalando la situación y gravedad de los hechos/conflicto.
Durante todo el tiempo que Hannah vive/padece éstas situaciones, no se percibe ningún tipo de ayuda externa o del centro escolar, ni tampoco se le da relevancia a que Hannah pidiera ayuda directa o no. Todos los capítulos giran entorno a sentimientos de venganza y culpabilidad; E insisto, creo que es un grave error por todo lo comentado anteriormente.
Algunos me diréis, pero Hannah sí pide ayuda cuando escribe de manera anónima o en el último momento, cuando habla con el asesor del instituto. Y sí tenéis razón, pero por eso he matizado con el adjetivo «directa».
En el primer caso, al tratarse de una nota anónima la ayuda puede verse limitada, aunque ciertamente tiene que ser suficiente como para que salten las alarmas en el centro. Y en el segundo caso, cuando acude al despacho del asesor, se le da una patina a ese momento como si Hannah jugara su última carta, cuando en realidad es la primera.
Actualmente existen recursos a la disposición de los niños y adolescentes, tales como: psicopedagogos en los centros escolares, servicios de mediación y asociaciones que trabajan la problemática del acoso escolar. De tal modo que se debería poder actuar desde la prevención, o bien, desde la contención y resolución, cuando la primera fase no ha dado los resultados esperados. Teniendo siempre presente un seguimiento posterior del caso.
4. También destacar la cantidad de estereotipos que están presentes en ésta serie. Sean estos de género, estética, tribu urbana, salud mental, sexualidad etc., y los cuales ya va siendo hora que fuésemos desterrando. Por ejemplo, podemos encontrar a las mujeres como hipersensibles, llevando al extremo sus emociones, llamando la atención, exagerando; ciertas tribus urbanas como más propensas —por decirlo de alguna forma— a la autolesión, las personas homosexuales avergonzadas de serlo, los docentes sin proporcionar una ayuda eficaz, entre otros.
Si el mensaje de la serie, por parte de los directores y productores, es la de respetar al otro individuo y su idiosincrasia, no se puede mostrar una perpetuación de estereotipos a este nivel, ni a otro en realidad.
Para finalizar, querría retomar la frase que os había comentado al inicio de este post, no sé si recordáis: «La curiosidad mató al gato». Pues bien, lo decía porque hagáis caso a las advertencias que aparecen en los capítulos antes de empezar. Sobre todo si habéis experimentado situaciones iguales o similares al acoso escolar o abusos. Os puede perturbar.
Comentadme ahora qué os ha parecido a vosotros la serie, o si tenéis ganas de verla. Me gustaría leeros :)
Algunos me diréis, pero Hannah sí pide ayuda cuando escribe de manera anónima o en el último momento, cuando habla con el asesor del instituto. Y sí tenéis razón, pero por eso he matizado con el adjetivo «directa».
En el primer caso, al tratarse de una nota anónima la ayuda puede verse limitada, aunque ciertamente tiene que ser suficiente como para que salten las alarmas en el centro. Y en el segundo caso, cuando acude al despacho del asesor, se le da una patina a ese momento como si Hannah jugara su última carta, cuando en realidad es la primera.
Actualmente existen recursos a la disposición de los niños y adolescentes, tales como: psicopedagogos en los centros escolares, servicios de mediación y asociaciones que trabajan la problemática del acoso escolar. De tal modo que se debería poder actuar desde la prevención, o bien, desde la contención y resolución, cuando la primera fase no ha dado los resultados esperados. Teniendo siempre presente un seguimiento posterior del caso.
4. También destacar la cantidad de estereotipos que están presentes en ésta serie. Sean estos de género, estética, tribu urbana, salud mental, sexualidad etc., y los cuales ya va siendo hora que fuésemos desterrando. Por ejemplo, podemos encontrar a las mujeres como hipersensibles, llevando al extremo sus emociones, llamando la atención, exagerando; ciertas tribus urbanas como más propensas —por decirlo de alguna forma— a la autolesión, las personas homosexuales avergonzadas de serlo, los docentes sin proporcionar una ayuda eficaz, entre otros.
Si el mensaje de la serie, por parte de los directores y productores, es la de respetar al otro individuo y su idiosincrasia, no se puede mostrar una perpetuación de estereotipos a este nivel, ni a otro en realidad.
Para finalizar, querría retomar la frase que os había comentado al inicio de este post, no sé si recordáis: «La curiosidad mató al gato». Pues bien, lo decía porque hagáis caso a las advertencias que aparecen en los capítulos antes de empezar. Sobre todo si habéis experimentado situaciones iguales o similares al acoso escolar o abusos. Os puede perturbar.
Comentadme ahora qué os ha parecido a vosotros la serie, o si tenéis ganas de verla. Me gustaría leeros :)
=============================================================
Enlaces de interés:
- Teléfono contra el acoso escolar y malos tratos en el ámbito de los centros escolares:
900 018 018 (24 horas al día, 365 días al año, gratuito, anónimo y sin quedar reflejada en la factura telefónica de los usuarios)
- Artículo EL SUICIDIO Y LOS FACTORES DE RIESGO ASOCIADOS EN NIÑOS Y ADOLESCENTES (Rev.Medica.Sanitas 13 (2): 28-35, 2010)
0 comentarios:
Publicar un comentario