Derecho

- CONCEPCIÓN ARENAL DE PONTE:

Nacida un 31 de enero del año 1820 en Ferrol y fallecida el 4 de febrero del año 1893 en Vigo. Fue escritora, periodista, jurista y férrea defensora de los derechos de la mujer. Convirtiéndose así en una figura pionera del activismo feminista y de la igualdad de género a lo largo del siglo XIX.

A sus catorce años y ya huérfana de padre, se trasladó junto a su madre y hermanas a Madrid. Concepción estudió en un colegio de señoritas y siete años más tarde ingresó, contra la voluntad de su madre, en la Facultad de Derecho de la Universidad Central. Para ello tuvo que asistir a clase vestida con ropajes masculinos, pues en esa época estaba prohibido el acceso de las mujeres en la universidad. Fue descubierta poco después. No obstante llegó a un acuerdo con el rector de la universidad, Concepción Arenal tendría que demostrar sus conocimientos con un examen si quería permanecer en la facultad. Aprobó y posteriormente el claustro dictaminó que podía seguir su formación, pero solo como oyente. Nunca pudo matricularse, tampoco interactuar con los demás alumnos ni realizar exámenes oficiales  y, por lo tanto, tampoco obtener la titulación correspondiente al finalizar los estudios en el año 1845.
Durante su estancia en la universidad, Concepción conoció a Fernando García Carrasco, hombre con el que se casó y tuvieron dos vástagos, Ramón y Fernando. Fue entonces cuando ella volvió a ponerse sus ropajes masculinos para poder asistir, junto con su marido, a las tertulias políticas y literarias de Madrid. Fue entonces cuando la faceta de escritora empezó a brotar, dando a luz obras de diversa índole.
Con el fallecimiento de su esposo, en el año 1857, Arenal cogió las riendas de la editorial del periódico liberal La Iberia, convirtiéndose en editorialista. No obstante, en ese mismo año, tuvo que abandonar el trabajo debido a una ley que promulgaba el hecho de que los artículos publicados debían ser firmados.
En 1863 se convirtió en la primera mujer que recibió el cargo de visitadora de cárceles femeninas, pues hasta entonces sólo los hombres ostentaban esa posición. Dos años después fue cesada como consecuencia de la publicación de una obra suya llamada Cartas a los delincuentes, en la que defendía una reforma del código penal.
En cuanto a su papel protagonista y pionero del movimiento feminista español, de igualdad de género y de promoción de la educación en las mujeres, Concepción Arenal publicó varias obras, siendo algunas de ellas las que se mencionan a continuación:

- La mujer del porvenir (1869) | Obra en la que se defiende el derecho de la mujer, y libre acceso, a la educación; así como se desmienten las supuestas limitaciones genéticas de la mujer, respecto al hombre. «Concepción considera a la mujer como ser humano marginado a quien hay que ayudar, respetar y estimular, educándola en la dignidad de condición de mujer y ser humano.»

- La mujer de su casa (1883) | Obra en la que se amplían las teorías de La mujer del porvenir y analiza los obstáculos por los que debe pasar la mujer, en la época, para alcanzar la dignidad social y política. 

- La educación de la mujer (1892) | Obra breve en la que se plasma la culminación de los pensamientos feministas de Arenal en cuanto al derecho de la mujer a poder acceder a la educación.

- La mujer trabajadora (?) | Obra en la que se realiza una crítica sobre la disparidad de sueldos entre las mujeres y los hombres que trabajan en las industrias.

- VICTORIA KENT SIANO:

Nacida en Málaga, un 7 de marzo del año 1898 y fallecida en Nueva York un 26 de septiembre del año 1987. 

Ya desde pequeña mostró una actitud firme y tenaz en sus convicciones, tanto que cuando se negó a ir al colegio, su madre la tuvo que instruir en la lectura y escritura desde casa. 

Ya en 1916 se trasladó a Madrid para poder acceder a estudios de bachiller y en 1920 ingresa en la Facultad de Derecho, donde cursa la carrera de manera no oficial.

Aunque Victoria Kent ha sido más recordada por la idea un tanto opuesta a Clara Campoamor en cuanto al sufragio femenino —es importante recordar que nunca se definió como feminista—, Victoria fue abogada y política republicana española y la primera mujer en ingresar en el Colegio de Abogados de Madrid (1925), al igual que la primera mujer en el mundo que ejerció como abogada ante un tribunal militar.  

Kent se licenció en derecho en junio de 1924 y se colegió en enero del siguiente año, pudiendo así ejercer y realizar sus primeras intervenciones como abogada defensora. En 1931 defendió a Álvaro de Albornoz, miembro del Comité Revolucionario Republicano, ante el Tribunal Superior de Guerra y Marina consiguiendo la libertad de su cliente y un nombre para si misma en el ámbito jurídico —ámbito todo sea dicho de paso, mayoritariamente masculino—. Consiguiendo posteriormente, en el año 1931, ser miembro de la Real Academia de la Jurisprudencia y Legislación, y en 1933 de la Asociación Internacional de Leyes Penales de Ginebra.
Kent se afilia al partido Radical Socialista y se presenta a las Cortes de Madrid (1931), tras sus intervenciones parlamentarias —sobretodo en la que defiende su postura en contra del sufragio femenino hasta que la mujer no sea liberada del yugo de su esposo y la influencia de su confesor/Institución eclesiástica, a la par que cuente con una formación previa— causa impresión al presidente de Alcalá Zamora, proponiéndole éste el cargo de Directora General de Prisiones.
Decidida a seguir la labor de su predecesora, Concepción Arenal, e impulsada por sus ideales humanistas, Victoria promulga una reforma penitenciaria revolucionaria. Empeñada en conseguir una vida mejor para los presos, defiende las ciertas reformas y promulga los siguientes decretos —alcanzan perfiles inéditos en España y Europa—:

- reinserción social de los presos
- eliminación de cadenas y grilletes
- derecho a leer prensa
- libertad de asistencia a los actos religiosos
- permisos de salida
- incremento de la ración alimentaria
- creación de talleres de trabajo 

Pero algunas de sus reformas no se acogen con mucho entusiasmo por los lobbys del momento y tampoco son aceptadas por éstos, así que Victoria Kent se ve obligada a dimitir de su cargo, tres meses después de su nombramiento. 

Una vez finalizada la Guerra Civil Española (1936-1939), con la victoria del llamado Alzamiento Nacional, Kent se vio forzada a exiliarse, ya que ayudó a aprovisionar a los combatientes del bando republicano.
Pasó por París, México y finalmente se estableció en Nueva York. Siendo en el primer destino donde, con el cargo de 1a Secretaria de la Embajada de París, se encargó de buscar alojamiento a los niños del bando republicano que se vieron también forzados al exilio.

«Yo no tengo otra pasión que España, pero no regresaré a ella mientras no exista una auténtica libertad de opinión y de asociación. —Victoria Kent Siano—»

Fuentes: Concepción Arenal | El diario.es , Tribuna feminista | El Plural , Victoria Kent Siano | La Vanguardia , Victoria Kent | Wikipedia